Paseando
por las calles gaditanas
en
el barrio de la viña encontramos la amistad
y
una gente que derrocha simpatía
y
que viven orgullosos de sentirse junto al mar
que
bonito es decir yo soy viñero
presumiendo
con su caña de pescar
y
pensar que esta bajando la marea
y
el cangrejo ya se puede mariscar
despertar,
bonito despertar
sentir
al amanecer tu iglesia repicar
yo
soñar, contigo he de soñar
porque
tienes un embrujo
que es digno de
envidiar
no
encuentro palabras que decirte
viejo
barrio cuna de los caleteros
y
hasta la voz se me apaga
cuando te digo
te quiero
como
te sobra el gracejo
y es tu mujer tan divina
contigo
quiero vivir y tendré que morir
en
el barrio la viña
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